miércoles, 31 de marzo de 2010

Café Gijón

Si me guardas media hora de tu vida te invito a un café. Sé que vale más que eso, pero tan sólo soy un poeta universitario; pobre por antonomasia. Dame unos años y te prometo un café largo en el Gijón. Eso sí, nada de descafeinados.

No hay comentarios: